Stevens Millancastro, un hombre de 30 años de edad fue acusado y condenado por colocar en reiterada ocasiones su semen en las botellas de agua y el teclado de la computadora de su compañera de trabajo como parte de una venganza.
Los hechos sucedieron en el condado de Orange, California luego de que Stevens Millancastro de 30 años fue encontrado culpable de untar su semen en las botellas de agua de su compañera así como en el teclado de la computadora por lo que recibió una condena de 30 meses de prisión, además deberá registrarse como delincuente sexual de por vida.
La condena fue otorgada por la jueza de la Corte Suprema del Condado de Orange Kathleen Roberts, quien sentenció al hombre sin jurado y aseveró que el delito era mucho mas grave e invasivo que un puñetazo, golpe o bofetada.
De acuerdo a la jueza, durante el testimonio del acusado y del médico fue que se supo de las acciones del hombre quien colocaba su semen en las botellas de agua y artículos personales de la víctima.
Stevens Millancastro ponía su semen a modo de “venganza”
Tanto él como la víctima trabajaban juntos desde el 2014 pero Millancastro comenzó a invitarla a salir por mensajes, motivo por el cual ella siempre lo rechazó. Este fue el inicio de al menos cuatro años de acoso por parte del acusado.
Ella lo acusó ante Recursos Humanos de la empresa y se le exigió a Stevens tomar un entrenamiento sobre el acoso sexual en el trabajo, lo cual provocó que él planeara su venganza.
La víctima comenzó a notar desde 2016 que el agua en sus botellas era turbia por lo que comenzó a desecharlas sin sospechar lo que realmente contenían.
Esto continuó repitiendo hasta qué, en 2017 se colocó una cámara de vigilancia en el escritorio de la mujer. Ahí se dieron cuenta que el sujeto iba al baño y regresaba para colocar el semen en el agua, computadora y demás artículos de la mujer.
Fuente: SDP